“La culpabilidad de Nivardo “N”, como presunto feminicida de la joven Lefni , fue bajo tortura por parte de elementos de la policía de investigación de la Fiscalía mexiquense, por ello pedimos se integre nuevamente la investigación y se detenga al verdadero asesino”, señalaron a esposa y el padre del indiciado, quien se encuentra recluido en el penal de Tenango Del Valle.
En conferencia de prensa la esposa de Nivardo “N” , Bianey Estrella Lagunas Tejas, acompañada, por su padre, Cristóbal Lagunas Enríquez, dijeron que está demostrada la tortura de la que fue víctima Nivardo “N”, pues presenta golpes y la clavícula rota y hay pruebas que no coinciden con la culpabilidad de su esposo, señaló.
Mencionaron que el pasado 18 de marzo el presunto culpable, fue extorsionado en un retén por parte de la policía estatal, cuando volvían de vender su mercancía en el mercado de Palmillas por rehusarse a pagar, fue aprehendido y presentado ante el Ministerio Público por el delito de cohecho, pero bajo tortura lo obligaron a firmar unas hojas en blanco, para después liberarlo y policías de investigación le exigieron el pago por 85 mil pesos a cambio de dejarlo en paz o habría consecuencias.
Como se negó a realizar el pago a los policías ministeriales, lo obligaron a firmar las hojas para fabricar una declaración en la que admite haber sostenido una relación sentimental con la joven Lefni , quien laboraba en un negocio de renta de máquinas en el centro de esa localidad.
Tras lamentar profundamente la desaparición y posterior muerte de la señorita Lefni, el padre de Nirvardo, pide al Fiscal, José Luis Cervantes Martínez, se investigue nuevamente la carpeta para dar con el verdadero feminicida.
La esposa del indiciado, Bianey afirmó que derivado de la acusación, los familiares de la víctima circularon imágenes de su esposo, resultando en un linchamiento social, agresiones y señalamientos, que la obligó a sacar a sus hijos de la escuela.
Explicó que el día 3 de mayo, cuando aprehendieron a su esposo, un grupo de hombres sin identificarse y a bordo de vehículos sin rótulos, se llevaron a Nivardo cuando a bordo de una motocicleta, junto con ella y uno de sus hijos, que recogieron en la escuela.
Tras varias horas desaparecido, el acusado se comunicó con su suegro, para informarle dónde se encontraba.
“A mi esposo lo mantuvieron incomunicado por horas, luego le iniciaron el mismo día de su detención una audiencia en la que le informaron que estaba acusado de feminicidio por la muerte de la joven Lefni”, indicó.
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