Vecinos de la unidad habitacional Pueblo Nuevo se manifestaron la mañana de este martes para expresar su descontento con las autoridades locales y estatales, debido a la continua emisión de permisos de construcción a Sadasi, a pesar de las grietas que se han abierto en el suelo de la zona y que aún no han sido atendidas.
Las grietas, que comenzaron a aparecer desde 2022, han generado preocupación entre los residentes debido a los posibles riesgos estructurales y de seguridad. A pesar de las repetidas denuncias y solicitudes de inspección por parte de los vecinos, las autoridades aún no han tomado medidas para resolver el problema. En cambio, continúan otorgando permisos a las constructoras, lo que ha incrementado el temor de los habitantes sobre la estabilidad del terreno y la seguridad de sus hogares.
“Es inaceptable que las autoridades sigan priorizando los intereses de las constructoras sobre la seguridad de los vecinos”, afirmó María, una residente afectada. “Hemos reportado estas grietas en múltiples ocasiones, pero nuestras preocupaciones han sido ignoradas. Nos sentimos abandonados y desprotegidos”.
Los manifestantes, portando pancartas y coreando consignas, exigieron una respuesta inmediata de las autoridades municipales y la suspensión de los permisos de construcción.
“Queremos vivir en un lugar seguro. No es justo que nuestras casas estén en riesgo por la falta de acción de las autoridades”, expresó Ramón, otro vecino de la colonia. “Es necesario que se priorice nuestra seguridad y se detengan las construcciones hasta que se resuelva este problema”.
Las autoridades locales aún no han emitido un comunicado oficial en respuesta a la manifestación, reflejo de la creciente frustración entre los residentes y pone de relieve la necesidad de una planificación urbana que tenga en cuenta la seguridad y el bienestar de la comunidad.
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